Ingredientes
- 4 huevos
- 1 pepino
- 2 dientes de ajo
- aceite de oliva
- 1 pastilla de caldo de verduras
Lavar y secar un pepino verde grande.
Pelar el pepino hasta la parte que amarga, procurando coger lo mínimo de carne blanca, se pretende utilizar solo la cáscara verde.
Poner una gota de aceite en una sartén y rehogar los ajos cortados muy pequeñitos
Trocear la cáscara y añadirla a la sartén con un poquito la pastilla de caldo de verduras
Sofreir lentamente hasta que todo esté muy doradito.
Batir los huevos, mezclarlos con la cáscara de pepino y cuajar un par de tortillas hasta que estén doradas pero jugositas por dentro.
Esta será probablemente la tortilla más curiosa que ponga aquí, pero es que esta riquisima, la hacia mi madre y lo más parecido que se puede comer es la tortilla de espárragos trigueros, con ese puntito de amargor, la verdad es que está exquisita.
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Curiosa sí que es, pues nada habrá que probarla
ResponderEliminarHabía oído hablar de ella, nunca la he hecho. A veces la hago pero con las hojas verdes de las lechucha, de esas que se tiran y está muy buena.
ResponderEliminarHe querido decir lechuga y por poco pongo lechuza.
ResponderEliminarjajaja, lechucha, o mismo existe, yo tambien la hago de "lechucha" de vez en cuando y está muy rica.
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